miércoles, 4 de febrero de 2009

LOS BULOS DEL 0,25 mg/l DE ALCOHOLEMIA


Ni correr, ni hacer flexiones, ni comer chicle, ni meterse un grano de café bajo la lengua...

La tasa de alcoholemia se elimina a un ritmo fijo durante seis horas. Es imposible acelerarlo.
«Buenas noches. Esto es un control de alcoholemia, ¿ha bebido usted?». Llegados a este punto, cuando un policía detiene un coche, ya no hay nada que hacer para eliminar el etanol que circula por las venas. Debería haberlo pensado antes, podía no haber pedido tantos cubatas o haber cogido un taxi, pero... ya es demasiado tarde.

Algunos conductores que dan positivo en el primer test orientativo, recurren a extraños trucos para intentar reducir la tasa en el segundo, de confirmación, mucho más preciso. Se considera infracción superar los 0,25 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, y desde la reciente reforma del Código Penal, a partir de 0,60 es delito, y por tanto el automovilista queda detenido.

«He visto a conductores correr, hacer flexiones y hasta comer hierba delante de nosotros para bajar la tasa», comenta un agente de Tráfico. Más extendido está el mito del grano de café o la pastilla de mentol bajo la lengua antes de soplar en el alcoholímetro, o la leyenda de que comer chicle o un azucarillo, o tomar almax reduce el nivel de alcohol en sangre. Se trata de puros bulos, que se difunden por internet como métodos infalibles. «El alcohol sólo se elimina por la orina, no es tan fácil de bajar, lo mejor es descansar, irse a casa en taxi y beber mucha agua», aconseja un agente. El grado de eliminación a través del hígado es fijo, no se puede acelerar.

Los estudios toxicológicos indican que el cuerpo metaboliza entre 20 y 30 gramos de alcohol por hora, en función de cada persona. El mayor pico se alcanza al cabo de una hora desde la última copa; a partir de ese momento empieza a descender y puede tardar hasta seis horas en eliminarse por completo. Se han dado casos de conductores que han dado positivo incluso después de haber dormido varias horas y comido un bocadillo. Después del primer trago, el etanol que contiene la cerveza, el vino o un combinado llega a la sangre en apenas unos minutos, pero luego no se va tan rápido. El grado de afectación depende de muchos factores: el peso, la edad, el sexo -las mujeres lo toleran peor-, de lo que se haya comido, e incluso de otras circunstancias como sufrir un resfriado o padecer estrés.

También se alimenta entre los conductores la creencia de que si en la radio suena música clásica o una emisora de radio informativa cuando se baja la ventanilla delante del policía, éste no le parara al creer que no está de fiesta. Los agentes que seleccionan en los controles, sin embargo, se fijan en los ojos y en el habla, auténticos delatores de la embriaguez. «El aspecto suele ser claro: ojos vidriosos, olor a alcohol, hablar pastoso, andar tambaleante...», describe un agentede Tráfico. «Notamos la influencia de la mezcla, no es lo mismo cenar en condiciones que beber lo mismo con el estómago vacío». La costumbre también influye. «Si tiene hábito de ingerir alcohol, su cuerpo lo tolerará mejor. A unos les afectan mas dos vasos de bebida alcohólica que a otros veinticinco.......

2 comentarios:

jorge dijo...

Lo mejor es conducir sin probar el alcohol. Como añadidura a lo que has comentado, decir que el cuerpo elimina 0,12 mg/l a la hora. Es decir, te tomas una cerveza y hasta una hora después no la has eliminado.

Yo he conocido gente que se ha tomado una cuchara de aceite de oliva crudo antes de beber...si te digo como terminó no te lo crees jeje

Un saludo

EL RINCON DEL MANDILON dijo...

Bueno Jorge, estou contigo en que lo que realmente en un control de alcohol es infalible es no haber bebido. Todo lo demás como ya expongo en el articulo son bulos que te digo que no valen para nada y que todos esos métodos los he vivido en vivo y en directo. Sobre la tasa a eliminar,lo que dice Toxicologia es una teoría ya que cada persona elimina según su edad, sexo, estado de su higado, etc.........